miércoles, septiembre 05, 2007

Lo que hay que saber: un buen salario no se consigue con el tiempo, se negocia antes de entrar en una empresa

Continuando mi reflexión acerca de los prejuicios (o ideas ingenuas) que tenemos respecto a cómo es la vida laboral, hablaba el otro día de cómo nos venden la moto del "prestigio" en las grandes empresas, sólo para hacernos tragar con una condiciones salariales malas ... y que sólo irán a peor.

Como me dijo una vez una docente de ESADE: "el salario hay que negociarlo al principio, cuando se entra en la empresa. Una vez dentro ya no hay nada que haga cambiar sustancialmente la cantidad que te pagan". Esto es: no te creas cuando te digan eso tan oído de: "ahora empezarás cobrando poco pero dependiendo de tu desempeño, en muy pocos años llegarás a esa cifra de ensueño que nos estás dando como mínimo para empezar a trabajar". Blablabla. Te subirán el IPC (eso cuando te lo suben) y basta. Y si no estás contento, te dirán lo de siempre: "ahí está la puerta".

Te pondrán todo el rato la excusa de siempre: "no, este año no te podemos subir más que eso, es que ha habido reestructuración/cambio/reorganización/el mercado está difícil/blablabla...". Una excusa que contenga muchas palabras vacías de éstas de management y economía. Para hacerlo que suene "complicado". Mientras, te enteras por los rankings de la prensa especializada (porque tú también la lees) de que a tu presidente le van a pagar 30 millones de euros este año, y eso independientemente de los resultados de la empresa (que por cierto, no son muy buenos).

Pero es más: justamente cuanto más vende la empresa, más rácanos se muestran (los de RRHH, el Presi, los jefazos, o quien sea que tenga la última palabra en esto).

Y tú que tragaste con un salario un 25% inferior al que estimabas razonable para sobrevivir (no ya para vivir, que ese es otro cuento), te encuentras atrapado en un callejón sin salida: cada vez más responsabilidades en el trabajo y el sueldo que te lo congelan (cuando no te quitan poder adquisitivo directamente).

Respecto a esto último, hay que saber que ya no es un tabú subirle al empleado por debajo de la inflación. Que las empresas se atreven cada vez más a cruzar la línea entre contratar y explotar a los trabajadores y que suelen recurrir cada vez más a eso de "la media del aumento de salarios este año para X colectivo". Y poniendo esa media en una cifra ridículamente baja, como por ejemplo en un 3% (aumento total y final, no aumento + subida IPC como algun@ podría interpretar). Y Dios sabe cómo han llegado a esa cifra, ni hay ninguna manera de comprobar lo que dicen, dado que los datos sobre salarios son confidenciales.

Ese 3% además, suele aplicarse a los que menos cargas familiares tienen (porque las empresas paternalistas también piensan en eso: no en tu desempeño, sino en cuántas bocas tienes que alimentar, aunque tu pareja trabaje y ya no tengas hipoteca que pagar). Es decir: que un soltero sin hijos que se mata a trabajar 14 horas diarias y aporta verdadero valor añadido tiene menos derecho a una subida mayor que un casado de 50 años, gruñón y que se toca las pelotas, sólo porque éste último "tiene hijos". ¿Es sólo a mí a quien eso le parece injusto? Supongo que cuando tenga un montón de críos berreando en casa mi visión cambiará, pero de momento me parece una aberración aplicar criterios familiares a las subidas.

Y luego justificándose con un mohín medio sonrisa en la boca cuando te comunican que te suben esa miseria porque "es la media" (por debajo en muchos casos de la inflación oficial y siempre de la real, que ya sabemos que los cálculos que se hacen para el IPC son de risa). Aún cuando sepan que te están quitando poder adquisitivo. Con dos cojones. Y añadiendo cosas tan sangrantes como que "para subirle por encima de la media a alguien hay que ser excepcional". Tan excepcional como, por ejemplo, el idiota que te está diciendo esto, ascendido a jefe sólo por "hijo de".

Afortunadamente a mí me tocó un muy buen plan de carrera cuando entré en mi empresa y tuve suerte de estar un poco "en una burbuja" en lo que se refiere a las subidas de salario. Pero eso no quita el tener que asistir a reuniones multitudinarias donde ves la verdadera cara de los jefazos cuando sueltan perlas como éstas. Y tampoco quita que años después veas que también a tí lo que te prometieron en un principio empiezan a regatearlo cada vez más e intentan "venderte la moto".

Teniendo en cuenta la tendencia radical del mercado español a ir reduciendo cada vez más los salarios pagados, tanto en términos relativos respecto a las subidas de precios, como en términos absolutos (es decir, hace 7 años contrataban a un principiante por 18.000 euros y no era nada del otro mundo; hoy en día contratan a alguien similar por incluso menos, unos 15.000 euros de entrada), mucha gente no tiene opción siquiera de intentar negociar el salario. Porque la respuesta de la empresa es: o coges lo que te ofrecemos o a la calle. Es decir, que la mayor parte de las empresas ni siquiera se plantean negociar el salario de partida, porque piensan que eso es "rebajarse" ante el candidato. Y, por Dios, eso no puede hacerse porque, al fin y al cabo, ¿quién demonios es el candidato? Nadie. Las empresas deben de pensar que nos hacen un favor pagándonos.

De donde surgirá mi siguiente reflexión y post: en España la calidad no es un criterio para la contratación. Por lo tanto, no hay negociación posible. Y en los escasos casos donde la hay, se están negociando migajas: 3000 euros arriba o abajo. Para empresas que facturan miles de millones. Lo increíble del caso es que puede ocurrir que una empresa descarte a un candidato sencillamente por pedir esos 3000 euros de más: para ella esto es un indicio de "rebeldía", o sea, de alguien no manejable y que no traga. Ver para creer.

Conclusión: lo que bien empieza, bien acaba. Pero, por otro lado, los habrá que digan que mejor viajar aunque sea en las bodegas, que quedarse en el muelle esperando a un barco con sitio para sentarse. En otras palabras, que la opción nos la presentan clara: esclavitud en la bodega o dignidad en el dique seco. Menuda elección, pero eso sí: que nadie diga que no estamos en una democracia y que no tenemos libertad para elegir...

Leer más: Contratar en base al prestigio: vender humo a largo plazo

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente, Lunes. Hablaste de mi trabajo, ¿verdad? Pues es que la empresa es así. Como tantos otros lugares.

Anónimo dijo...

Tu al menos tienes un plan de carrera. Esto para empresas grandes también les resulta rebajarse hacia sus empleado. Luego se extrañan que pasados los años la productividad marginal de sus empleado disminuye. Normal, si no tienes nigún objetivo profesional ni económico.

la doctora yvonne dijo...

Lunes, me gustó mucho este post, quizás estoy un poco desinformada pero es la primera vez que leo algo así y me doy cuenta de que es muy cierto..

Anónimo dijo...

Totalmente cierto.

Y que no te de pena mentir como pinocho.

Siempre estás a tiempo de negociar, pero pide porque luego la cosa puede paralizarse, y como bien dices, 3000 euros es una porquería

(aunque yo conozco gente que por 1000 euros han aceptado el cambio)

Y muy importante, pide SIEMPRE carta de intenciones.

Todo que quede por escrito, las condiciones, salario, jornada, etc.

vaderetrocordero dijo...

No tiene mucho que ver, pero... despues de leer el post relacionado, estoy empezando a mentir descaradamente en las entrevistas y curriculums que envío. Y funciona. He tenido más posibilidades en dos días de hijo de puta que en cuatro meses de buena fe. Y total, los trabajos a los que opto los podría desempeñar con los ojos cerrados...

Anónimo dijo...

La situacióne s España es muy preoccupante porque a los jovenes no les pagan los jefes para quedarse con los beneficios creados por...los jovenes empleados que occupan sus multiples oficinas.
La solución: te marchas de la empresa y montas la tuya

Erkemao dijo...

Te comentaba en el post anterior sobre estas reflexiones que estás haciendo, que esperaba con impaciencia esta entrada. Por lo que veo ya la tenías ;)

El problema que veo, es que a no ser que seas el candidato ideal o vengas con un buen aval (sea cual sea; eso incluye ser "hijo de", "amigo de", "novio de") , negociar un buen punto de partida es difícil. A veces es mejor empezar con menos y conseguir tareas o puestos en los que seas lo más imprescindible posible. Si lo consigues, habrá merecido la pena, si no, cuanto menos tiempo hayas perdido, mejor que mejor.
Ciertamente esto enlaza con la calidad y el sentido peyorativo que tiene en muchas empresas de cara a los sueldos.
Saludos.