jueves, noviembre 22, 2007

El Capitalismo y las grietas


El sistema en el que vivimos (al menos la mayor parte del hemisferio Norte, incluida China) se llama Capitalismo.

En el Capitalismo un día estás arriba y al siguiente puedes estar abajo. Por eso es importante aprovechar los momentos en los que estás arriba. Porque al siguiente puedes estar abajo. Y cuando estás abajo ya no le importas a nadie, ni nadie se acuerda de ti.

Y además, la diferencia entre estar arriba o abajo es muy pequeña. Ocurre en fracciones de segundo. De repente lo que iba bien empieza a ir mal. Y se acabó. En fracciones de segundo.

Además en el Capitalismo existe algo que se llama las "grietas", las "fisuras" del sistema, por donde la gente cae, se desliza hacia abajo y es expulsada por el sistema. De manera tácita y sin que nadie se dé cuenta. Son esa gente que vive debajo de los puentes y que pide en las esquinas. Nunca olvido esta pequeña diferencia cada vez que paso por delante de alguno así.

Hay que tener verdadera hambre para sobrevivir en el Capitalismo. Hambre de competir contra el prójimo, de eliminarlo si es necesario. De hacer las cosas mejor que nadie para asegurar la propia supervivencia. De luchar por uno mismo. Cueste lo que cueste algunas veces. Despertarse antes que nadie, llegar al trabajo antes que nadie, tener más ideas que nadie. Asesinar, masacrar, eliminar. Competidores en el mercado o en la inmensa arena que es la vida. Salvajes como los animales.

PS: todo esto a cuenta de que esta semana he estado en Londres y vi a uno de los (muchos) sin techo pidiendo en una esquina en medio de la City londinense. Fue una pobre sombra gris en medio de la oscuridad y del frío, sin inmutarse. Probablemente no mucho antes había sido una persona con una casa y una vida correcta.

sábado, noviembre 10, 2007

Sobre por qué Porfineslunes escribe menos que antes

Menos... mucho menos, diría yo. El que haya asomado la nariz regularmente por aquí todos estos días, habrá visto que los posts se vuelven cada vez más raros (de raramente, no de otra cosa). ¿Qué le está pasando a porfineslunes que ya no escribe una novela cada día como antes?

Pues que acabo de empezar esta misma semana en una nueva empresa, donde evidentemente al principio se tienen que hacer méritos quedándose hasta tarde, según mandan los "cánones" españoles de la baja productividad y de la no conciliación de los horarios personales y profesionales. Es decir: que aunque no tenga ya nada más que hacer a partir de las 6 de la tarde, y aunque haya pasado ya las 8 horas de rigor trabajando, pues tengo que "hacer tiempo", porque de ahí nadie se mueve antes de las 19:30h. Es ridículo: todos se espían por el rabillo del ojo para pillar al "desertor poco comprometido con la empresa" que se atreva a abandonar la oficina a su hora para ir a casa a empezar una sana vida personal alejado de la luz artificial, la moqueta llena de bichos y polvo y miles de vibraciones eléctricas que producen migraña.

¡Ah! y eso sin olvidar que tras salir a la hora políticamente correcta (las 19h, por aquello de que soy nuevo y todavía me lo puedo permitir, aunque aún así me voy con un cierto sentimiento de culpabilidad, ¡manda coj...!), me quedan ni más ni menos que 45 minutos de tortura atasqueril, respirando humo de tubo de escape de coches y soportando frenazos y acelerones continuos. De tal manera que cuando llego a mi casa, estoy literalmente destrozado y no soy persona. Apenas si puedo cenar algo, arrastrarme hasta el sofá para ver algo por la tele y luego a la cama, porque a las 7 de la mañana el mismo ritual se repite. Qué vida.

Pero cuanto más te pagan, más horas tienes que perder al día (porque literalmente es perder, yo en 8 horas soy perfectamente capaz de organizarme y hacer las cosas que tengo que hacer), para no dar la impresión de "poco comprometido". No entenderé nunca esta ridícula mentalidad española, de quedarse hasta las tantas sólo con tal de "justificar el salario", que parece que aumentas la cifra de ventas de la empresa un 80% y no pasa nada, pero como te "pillen" largándote a las 6 de la tarde, pues se monta la marimorena...

En fin. Que seguiré escribiendo los fines de semana, que es cuando me queda tiempo para pensar en mis cosas y me recupero un poco del trajín de la semana.
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sábado, noviembre 03, 2007

¿A quién culpamos de la bajada de los salarios?

¿A los inmigrantes, según la última tendencia instalada entre los españoles de culparlos de todo a TODOS ellos?

¿O a los empresarios españoles, que han visto una ganga en esto de "importar" gente necesitada, muchas veces desesperada, y que no dudan en saltarse la ley con tal de rebajar costes, y aprovechan el argumento de la "competencia" en el mercado laboral y contratar inmigrantes con preferencia a los españoles?

Pues yo creo lo segundo. Pero vamos, me puedo equivocar y aquí resulta que en realidad son los pobres senegalíes que trabajan 14 horas al día por 40 euros y sin contrato en las obras, los que hacen que el salario medio de los licenciados se haya situado en los 1000 euros... La misteriosa transferencia de las condiciones salariales de los sectores de baja cualificación hacia los de alta cualificación de forma casi mágica... Que todo puede ser, ¿no?

jueves, noviembre 01, 2007

Cómo hacer que crean que haces algo